Ah.ayádevos, cueveros,
Durante la segunda mitad de junio continuaron las andanzas de algunos escariegos por la zona de Mañanga, que -aunque con bastante retraso- pasamos a relatar brevemente.
El sábado 15 el que suscribe se acercó hasta la zona para echar un vistazo a la
cueva MA-29, localizada con anterioridad. Lo cierto es que no dio nada de sí (13 m. de desarrollo), aunque nos hemos quedado con curiosidad tras ver cómo los murciélagos se colaban por un pequeño agujero al fondo de la cavidad. Topografiada esta pequeña cueva, se prospecta por la zona, no encontrando nada destacable. La reseña y la topo de la MA-29 se pueden consultar pinchando
aquí.
Al día siguiente un servidor se acercó hasta la
Cueva la Vallina (MA-02-03) para proseguir con las labores de topo, abordando diversos ramalillos pendientes en la red fósil, entre los que cabe mencionar el
meandro del guano, descubierto en una de las salidas del año pasado.
Tres días después, 19 de junio, el menda regresó a la Vallina, topografiando en esta ocasión parte del laberinto de pequeños conductos que se encuentran en la zona del
acceso sur al curso activo, formado por gateras y laminadores barrosos poco agradecidos, y donde la topografía avanza lentamente. En todo caso, con las labores de estos días la Cueva la Vallina alcanza los
1814 m. de desarrollo. La topo y la reseña, actualizadas, pueden consultarse pinchando
aquí.
Hay que mencionar que tras las lluvias de los días precedentes el río de la cueva se encontraba en carga, y que al salir de la cavidad nos acercamos hasta la surgencia de la misma,
H.uente MA-04, que manaba agua en abundancia. Lo mismo podemos decir de la cercana
H.uente la Vallina (MA-01), también con un volumen de agua muy elevado para la época.
Y para completar la semana, el viernes 21 Río y el que suscribe realizamos una actividad a la que le teníamos muchas ganas desde hace tiempo: explorar la que denominábamos
Torca'l H.ou los Cestos, o H.ou los Cestos 2 (boca signada como MA-14).
La torca ya había sido visitada en una ocasión años atrás por Río y Víctor, y se habían topado con una cavidad compleja que hacia abajo enlazaba con un curso activo y un meandrito inundado no explorado. Habida cuenta de la cercanía con la
Cueva'l H.ou los Cestos (MA-06-07) y de la corriente de aire que circula por esta cavidad, teníamos la esperanza de poder unir ambas en un único sistema. Ahora bien, como la actividad se organizó sobre la marcha, íbamos más que pelados de material: unos pocos pingos de cuerda y chapas contadas...
La entrada de la MA-14 es un pequeño pozo de 8 m. que nos deposita en una galería en descenso que va ampliándose hasta convertirse en una amplia sala. Al fondo de esta sala encontramos un gran caos de bloques en el que hay varios pozos que requerirán de un material que no llevábamos. La continuidad más evidente, por la derecha de esta sala, nos condujo a una serie de galerías de medianas dimensiones por las que Río trataba de encontrar el paso que les había conducido a la zona activa en la anterior ocasión. Tardamos un tiempo en dar con él, pero entre que sí y que no, exploramos prácticamente la totalidad de esta parte de la cueva.
Al final el acceso a la zona activa resultó ser un meandrito desfondado (y esforzado) por el que fuimos descendiendo hasta un pequeño pozo de 3 m,
el váter, que en su base conecta con unos laminadores pedregosos intensamente ventilados. Progresando por ellos salimos a una galería más amplia que reconocí de inmediato: ¡estábamos en el arranque del
meandro crunch de la Cueva'l H.ou los Cestos! ¡Habíamos logrado conectar ambas cavidades! Nos felicitamos por la unión de las dos cuevas en un único sistema, y con la alegría del momento seguimos explorando un poco, antes de emprender el regreso remontando con esfuerzo el meandro desfondado al que hemos bautizado como
meandro metrosexual.
De vuelta en la cabecera del meandro, comimos algo y emprendimos el regreso topografiando desde aquí hasta la boca de la torca. Es de mencionar que son muchas las continuidades no exploradas que ofrece el sistema, por lo que las expectativas son altas. El desarrollo topografiado en el -a partir de ahora-
Sistema del H.ou los Cestos alcanza los 525 m, y lo explorado ronda ya el kilómetro.
Ya en el exterior, aún nos acercamos hasta otras dos cuevas localizadas en las semanas anteriores y que estaban pendientes de exploración. La
cueva MA-35 (la del raposu) se explora hasta salir por otra boca (MA-50), totalizando unos 50 m. de recorrido que no topografiamos. La otra, la
cueva MA-37, cierra sin prácticamente desarrollo. Como no podía ser de otro modo finalizamos la jornada tomando unas cervezas, en esta ocasión en Barru, en vez de en Porrúa como viene siendo tradicional.
Las perspectivas para la zona de las Mañangas siguen siendo buenas, y sin duda continuaremos con las exploraciones...
Saludos soterraños!!